viernes, 23 de octubre de 2020

El Taller de Canto en el Nivel Secundario

Artículo publicado en la revista del "Consudec" N°1073, 4° miércoles de Junio 2008 

El TALLER DE CANTO EN EL NIVEL SECUNDARIO. 

    Complementando los artículos teóricos sobre “El canto en iniciación musical” elaboro esta propuesta de trabajo práctica centrada en el nivel secundario.

  En la escuela debería haber siempre un espacio para cantar pero cuando se enseña música en el nivel secundario y se quiere practicar canto nos encontramos con muchas dificultades que no nos permiten avanzar en esta práctica. En las clases generales los grupos son heterogéneos, en cuanto a intereses, habilidades y experiencias previas.  De allí surge la necesidad de crear actividades de Taller con grupos de alumnos de asistencia voluntaria.

    En los años que llevo como docente he notado las inmensas posibilidades que tiene el canto como formador musical de las personas. Lamentablemente se carece de una educación musical básica que garantice afinación y dominio técnico para hacer del canto una herramienta cotidiana de la enseñanza musical en todos los niveles escolares. A los profesores de música les faltan herramientas didácticas para convertir el aprendizaje de la música en algo útil y práctico para el niño y esta es la causante de escuchar en la escuela secundaria las tan repetidas frases:
“¿para que me sirve todo esto?”...................,
 “en música nunca aprendimos nada”...............;
 “en música no hicimos nada..........”
“no sé cantar o........canto mal.......”
 “no voy a ser músico.............. ¿para qué quiero aprender esto?.........”.
   Estas son solo algunas de las que escuchamos y que nos deberían hacer replantear porqué dicen todo esto. ¿Qué habrá pasado en música durante el jardín de infantes y durante la primaria? A veces pareciera que en vez de hablar de una clase hablan de un recreo, o de una hora libre donde se han improvisado actividades en vez de haberlas planificado como se hace en cualquier materia con algún tipo de correlación, de continuidad entre una y otra clase y más aún entre un año y otro. La música tiene sus códigos, su lenguaje especifico que si se aprende metódicamente como cualquier otro lenguaje, al llegar a la escuela secundaria se puede disfrutar y no sufrir como parece suceder con algunos grupos.
 Tomando en cuenta éste contexto, solo falta un disparador para proyectar un “Taller de canto”. Este  es el interés que  manifiestan algunos alumnos de cantar en clase y formar un coro, algunos porque no lo han hecho antes, otros dicen que el repertorio no les gustaba, los motivos son variados pero esto también forma parte de las demandas de los alumnos al llegar al 1° año de la escuela secundaria. Entiendo que el canto, es la base de la educación musical, además es una actividad que contiene un gran valor social, como así también contribuye a despertar y/o acrecentar ciertas aptitudes que a esta edad están bloqueadas, por los cambios físicos y psicológicos que pasan los niños, por los cuales, también se dificulta realizar dicha actividad en las clases regulares con grupos numerosos.
    El cantar produce un inmenso placer, pero en esta etapa los varones están en plena muda de voz o aún no la han cambiado, por lo que tienen dificultades para cantar correctamente, lo cual produce risas, y comentarios de sus compañeros, desarrollando inhibiciones que hacen desaparecer la alegría de cantar, pero al aprender a manejar su voz vuelven a sentir placer de realizar dicha actividad.
    En esta edad muchos casos de desafinación se solucionan fácilmente si se les permite cantar a una altura acorde a sus posibilidades. Otros casos de desafinación aparecen en niños o adolescentes tímidos que necesitan de un ambiente adecuado para soltarse, practicar y adquirir experiencia. La participación en el grupo suele ser un buen estímulo y el apoyo de las voces más seguras ayuda a desarrollar la práctica que necesitan.
    El canto tiene el gran valor de despertar la sensibilidad, factor importante en la educación básica de los alumnos, favorece la capacidad de atención y contribuye a la higiene de la voz.
    El canto coral  tiene un enorme valor social porque enseña a esperar y respetar las limitaciones y posibilidades propias y las de sus compañeros.
    Muchos niños por no saber usar correctamente su voz tienen disfonías que pueden llevar a patologías vocales (hiatos, nódulos, etc.) Por ello es imprescindible un buen trabajo vocal. Generalmente a esta edad cantan mal, gritando sin una buena respiración y colocación de la voz. La práctica del canto en la escuela es sumamente enriquecedora pero siempre y cuando se de a todos la posibilidad de cantar.
    Es indiscutible que los niños cantan espontáneamente pero en esta edad cuando ya son casi adolescente es necesario crearles un espacio con grupos más reducidos, para que todas las limitaciones ya citadas se transformen en la posibilidad de realizar una actividad tan agradable y gratificante como es cantar.
   Algunos de los objetivos que debe formular el profesor antes de proyectar un “Taller de canto" son:
Que el alumno logre:
  • Participar de una actividad grupal con alto valor social y que al mismo tiempo lo educa en el buen gusto y la cultura.
  • Despertar el interés por la actividad musical.
  • Cantar espontáneamente superando las limitaciones propias de la edad.
  • Desarrollar la capacidad de atención y respeto por sus compañeros.
  • Usar adecuadamente la voz cantada y hablada.
  • Desarrollar aptitudes musicales vinculadas a la impresión musical y a sensaciones emotivas.
  • Desarrollar las habilidades musicales necesarias para integrar un coro, banda u otro conjunto musical.
  • Reconocer la posibilidad de tener patologías vocales y comprender la importancia de un tratamiento especializado.
 
ACTIVIDADES
    En el taller se trabajará con grupos de 10 alumnos como máximo. En el primer encuentro se hará un diagnóstico para detectar eventuales patologías vocales y hacer una correcta nivelación del grupo y así planificar la tarea.
    La planificación del taller estará librada a los intereses y posibilidades de los alumnos, se trabajará con las canciones que ellos conozcan, que elijan y se les mostrarán otras en diferentes estilos para que amplíen y enriquezcan su gusto musical, teniendo como premisa que sea una actividad placentera, buscando un repertorio que trabaje los aspectos de la educación vocal-musical, al mismo tiempo que se educa la sensibilidad de los cantantes.
    En el primer cuatrimestre se buscará que los alumnos tengan la posibilidad de cantar al unísono con acompañamiento instrumental. Las clases deberían ser de 90 minutos destinando 20 o 30 minutos a la técnica vocal que incluye ejercicios de relajación, respiración y vocalizaciones. En esta cantidad de tiempo no debemos olvidar planificar cierta cantidad de minutos al trabajo personalizado que elevará el nivel del grupo favoreciendo el rendimiento.
    Los diferentes niveles entre los integrantes se irán acomodando con el trabajo grupal, pero salvo casos graves de desafinación que serán encarados con un trabajo especial y más personalizado.
    La propuesta es, producir en poco tiempo un buen resultado musical que será estimulado con audiciones, ya que lo importante es despertar el interés por una actividad musical creativa sin mayores requisitos técnicos previos. Además se elevará el nivel musical capacitándolos para ingresar en coros, participar en bandas o constituir cualquier grupo musical.
    Se trabajará con grupos heterogéneos con diferencias individuales de habilidad y experiencia previa por lo que será importante avanzar lentamente afianzando cada etapa del aprendizaje, dándoles a todos la oportunidad de cantar.
    Se comenzará reafirmando el canto al unísono, luego se introducirán algunas posibilidades de canto a varias voces, desde la más simple a las más complejas, incorporando instrumentos de percusión, guitarra, teclados y todo instrumento que los alumnos sepan interpretar para acompañar al canto.
   Para iniciar un trabajo vocal con adolescentes es aconsejable reunir a alumnos de edades comprendidas entre los 12 y 14 años, porque reúnen características físicas y psicológicas e intelectuales semejantes, además de cierta similitud en sus intereses por el repertorio a elegir,  es muy importante tenerlo en cuenta para trabajar con la voz.
   A partir de  una simple propuesta como esta el profesor puede ir planificando diferentes actividades que incluso puede derivar en la formación un coro escolar o incorporar instrumentos para poder integrar bandas escolares. De esta manera se podrán cumplir los objetivos antes mencionados y sobre todo aprender los elementos más rudimentarios para “hacer música” sintiendo el placer que dicha actividad produce.


3 comentarios:

  1. Que buen trabajo!! Por fin alguien que se ocupe de dar respuesta a las cosas que desde hace tantísimos años se dice en las aulas, "para que estudiar música" "para que me sirve" "nunca aprendo nada" etc, etc. Muy claras y oportunas sus respuestas. Gracias

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  2. Me parecen muy interesante la propuesta y las demás ideas que aparecen en este boletín; gracias; es muy bienvenido!!

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    1. Gracias por tu comentario, me alegra contribuir a la educación musical, ese es mi objetivo

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